El 100% de este Malbec proviene de la terraza aluvial de Altamira, ubicada a 1.200 metros sobre el nivel del mar.
El suelo se compone de un 3% de arcilla en la matriz fina con cantos rodados y gravas recubiertas de caliza que ocupan el 85% del volumen del suelo, dando al vino su elegancia y mineralidad.
CRIANZA / BARRICADO:
La uva pasa por un doble proceso de selección y se libera por gravedad en pequeños contenedores de hormigón.
Se inicia la fermentación alcohólica con levaduras autóctonas a 26°C durante 15 días.
Para mantener un manejo suave y cuidadoso, no se usa bombeo; el sombrero se gira mediante pigeage manual durante toda la fermentación.
El vino se crió en foudres sin tostar de 3.500 ltr durante 18 meses y 12 meses en botella.
Hubo una filtración gruesa antes del embotellado, para asegurar que no interfiriera con la calidad del vino.
CATA:
Una añada fantástica para nuestro Paraje Altamira Malbec, que muestra toda la complejidad, concentración y textura que esta denominación puede ofrecer; sin renunciar a la potabilidad ni a la gracia.
Tiene un color rojo rubí profundo con suaves matices violáceos.
En nariz es intenso y elegante, con aromas a frutas negras, cassis y ciruelas, además de aromas herbales, principalmente eucalipto.
Sutiles notas de tiza y piel de naranja comienzan a mostrarse a medida que el vino se abre en la copa.
El ataque es impresionante; es jugoso, fresco y vertical en boca.
Tiene una gran textura, notas de tiza y un final largo y aterciopelado que te deja con la boca agua y una sonrisa en la cara.